A pesar de que me mudaba al otro lado del Atlántico, no tenía ni la más puta idea de lo que me esperaba.
En el mapa Polonia y México son tan lejanos, quizás nada les une, no tienen nada en común.
Antes de tomar ese avión no idealizaba ni pensaba mucho en lo que esperaba. Asi como muchas cosas en esta vida no idealizo, la desilusión después puede ser muy grande.
Siempre he creido que la vida es un caos enorme donde poco a poco cada uno se situa.
¿Yo ya me situé?
Y aunque les suene muy cursi sabía que el amor de mi vida me esperaba.
Aquí llegue.
Poco a poco me acostumbré, a este lugar que con facilidad cambia su cara.
A escuchar una melodía totalmente diferente. A aprenderla poco a poco y comunicarme con ellos.
¿Que no ha sido de mi en este año?
No soy la misma persona definitivamente.
Me mudé de casa, me casé, me volví a mudar, viajé mucho, aprendí, aprendo y aprenderé el polaco, nuevos amigos, nueva familia.
De mi antigua casa extraño el gato de mi hermana, mi familia, la comida, los dulces de tamarindo, las caminatas y perdidas que me daba por la ciudad.
¿Que sea de mi el siguiente año?
No lo sé , no lo planeo y tampoco quiero saber.
El primero de mucho años aquí.
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